Experimentar la primavera desde un punto de vista microscópico, dentro de un ecosistema de condiciones estables y perfectas, una simulación de una naturaleza idealizada.
De este imaginario descrito, extraemos el tejido conductor del proyecto. La propia arquitectura permitirá que la primavera irrumpa en el evento desdibujando el límite entre el interior y el exterior.
El mundo interior ha sido germinado y polinizado respondiendo agradecido con exuberancia.
El invitado recogerá los frutos de este proceso minucioso, detallista, minimalista, creativo y en continuo flujo y cambio. Será por lo tanto inmerso y participante de este microsistema desde el que verá su antiguo mundo de forma diferente.
La experiencia cambia la percepción de las cosas como las habías visto antes.
Cordero Atelier se encarga de la dirección creativa, diseño musical, producción, decoración y arte floral de este evento para Hermés.
Un evento diseñado como un Haiku.
“La falta de puntuación para que los árboles que no hay dejen ver el bosque, con el fin de no distraer, de no robarle protagonismo al concepto que se quiere transmitir, ni poner barreras a los ojos del espectador, fronteras entre un segmento y otro, ni siquiera con una letra mayúscula al inicio.
La apariencia es de río continuo, agua que fluye, poesía ininterrumpida….”
la mariposa revolotea
como si desesperase
en este mundo
tiembla un rocío
y las hojas moradas
y un colibrí
en el agua
teme a su reflejo
la luciérnaga